18 de noviembre de 2015

BUENAS NUEVAS DE NUEVA ZELANDA

Hace unas semanas, con motivo de su visita al Perú, me reuní con Rhianon Berry, actual directora de la Nueva Zelanda Trade & Enterprise (NZTE). La NZTE es la oficina de comercio de Nueva Zelanda, pertenece al gobierno de ese país y su misión es promover que las empresas neozelandesas inviertan y comercien con el mundo.

La NZTE ha tenido éxito en Chile, facilitando inversiones cercanas a los USD 160 millones. Estas inversiones neozelandesas se centran en los sectores de alimentos, bebidas y tabaco con USD 43 millones, silvicultura con USD 24 millones y agricultura con USD 22 millones.

Nueva Zelanda tiene una extensión geográfica de 268 mil Km2, lo que resulta casi la quinta parte del territorio peruano; tiene una población de 4.4 millones de habitantes y un PBI percápita que llega a los USD 29 mil (casi cuatro veces el PBI percápita peruano).

Según TRADEMAP, Nueva Zelanda exportó en el 2014, USD 41,635 millones, lo cual es un monto muy similar a las exportaciones peruanas; pero a diferencia de nosotros que tenemos las exportaciones concentradas en minerales, el país del kiwi exporta principalmente productos y derivados agropecuarios. En efecto, su primer producto de exportación es leche y derivados lácteos con USD 12,146 millones (casi el 30% de sus exportaciones) cárnicos por USD 4,932 millones, maderables con USD 3,052 millones y frutas por USD 1,474 millones; de estas últimas destaca el kiwi fresco con USD 832 millones exportados.

Nueva Zelanda exportó al Perú (TRADEMAP 2014) USD 145 millones; siendo leche y derivados lácteos el principal producto con USD 130.8 millones, le sigue insumos de pastelería con USD 6.1 millones.

Perú exportó a Nueva Zelanda (TRADEMAP 2014) USD 30.4 millones; siendo las grasas y aceites el principal producto con USD 6.5 millones, sigue peletería y confecciones de pieles con USD 6.3 millones y frutas por USD 4 millones.

Tenemos mucho por aprender de Nueva Zelanda y allí la NZTE puede ser un gran aliado.

Como dato adicional citaré al Portal Frutícola en una nota sobre la posición de Nueva Zelanda respecto a los transgénicos:

La Horticulture NZ indicó que no tenía mucho que comentar al respecto, debido a que Nueva Zelanda no cultiva alimentos modificados genéticamente ni nunca lo ha hecho. Peter Silcock, director ejecutivo de Horticulture NZ, comentó el por qué “Nueva Zelanda tiene una buen posicionamiento internacional en términos de ser limpio y verde, y de lo que nos hemos dado cuenta es que hay muchos consumidores preocupados acerca de las modificaciones genéticas y nosotros necesitamos seguir las tendencias de los consumidores en términos de los productos que estamos enviando a los mercados”

16 de noviembre de 2015

LA QUE ME TRAJO HACIA AQUÍ

La semana pasada estuve en Pucallpa, capital del departamento de Ucayali, y podría haber dicho que la Universidad Intercultural de la Amazonia y su facultad de agroindustrias fue “la que me trajo hacia aquí” haciendo un símil con la famosa canción “La Contamanina”.
Ucayali tiene una extensión de 102 mil Km2 lo que equivale a 10.2 millones de hectáreas. De esta extensión, según el último censo agropecuario CENAGRO (2012) 1.85 millones de hectáreas (Has) están en posesión de comunidades nativas. En el departamento existen cerca de 90 mil hectáreas agrícolas: 20 mil Has de plátano, 15 mil Has de maíz, 14 mil Has de palma aceitera, 12 mil Has de cacao y 9 mil Has de yuca etc.
Ucayali tiene gas natural para unos 30 años más con el lote 31C otorgado en concesión a Aguaytía Energy del Perú, produce unos 70 millones de pies cúbicos por día, esto equivale a un 5% de lo que produce Camisea en Cuzco (lote 88 y 56). Se podría decir que Ucayali tiene una baja producción de gas natural, pero puede ser suficiente para desarrollar industria a partir de ello (actualmente el gas se utiliza para generación eléctrica).
Trato de identificar qué polos de desarrollo puede tener este departamento. El gas natural es una opción, el sector agrícola tiene sus limitaciones de capital y de mercado, la ganadería tiene sus limitaciones de conectividad para llegar al mercado (los 500 mil habitantes con bajo nivel de ingresos, no dinamizan la producción local) y qué nos queda, pues el negocio forestal.
Si pensáramos ¿dónde instalar un mega polo forestal en el Perú? Pucallpa puede ser la elegida, desarrollando su puerto fluvial, dragando los ríos, construyendo el tren que conecte con el ferrocarril central (que pronto se verá dramáticamente mejorado con el túnel trasandino). Pucallpa puede dar cobijo a una industria de celulosa y derivados de madera de dimensiones mundiales. ¿Qué se necesita?
Se necesita atraer inversión en plantaciones forestales y para lograr esto, la tierra debe ser entregada en propiedad al inversionista. Debemos pensar en una zonificación económica y ecológica donde el 10% o 20’% del territorio pueda ser vendido con derechos plenos de propiedad a inversionistas grandes, medianos y pequeños; haciendo que el mismo poblador del departamento también participe.
Además, se necesita el gran fondo de financiamiento forestal con años de gracia y tasas de interés muy bajas (para los inversionistas medianos y pequeños). Debemos romper el nudo gordiano del atraso con la espada de la inversión. Aumentemos los parques protegidos, las zonas de amortiguamiento, respetemos la zonificación que permita conservar los bosques de producción permanente; pero también abramos, legalmente, un espacio del territorio para el desarrollo.
Necesitamos generar empleo para la población, trabajo formal con beneficios y acceso a la seguridad social, dinamizando las economías locales. No podemos seguir de rehenes del fundamentalismo de los conservacionistas que pregonan un 100% del territorio virgen, negándose a ver que esta situación hace que prolifere la tala ilegal y todos los males de la informalidad. Zonifiquemos, destinemos el 20% del territorio a la inversión en sistemas de desarrollo donde ganemos todos.

23 de octubre de 2015

EL ELEFANTE BLANCO

Serie: Relatos cortos (10/10)
Por Angel Manero

EL ELEFANTE BLANCO

Usualmente se utiliza la frase “Elefante Blanco” para describir una obra de infraestructura pública grande, que impresiona desde afuera pero no tiene beneficio real para el país; ya sea porque es más grande de lo necesario o simplemente porque no se puede usar, solo se observa. Se dice que esta frase proviene del Asia, donde los elefantes blancos eran un elemento de lujo y veneración; su cuidado requería de un importante presupuesto para alimentarlo, adornarlo con joyas y recibir como buen anfitrión a todo visitante que venga a adorarlo. El elefante no se podía utilizar para carga, ni alguna otra actividad que le genere un ingreso al propietario.

Los Reyes solían regalar un elefante blanco en sesiones solemnes a aristócratas que no eran de su agrado. Es decir les daban el honor de tener un bien apreciado, pero al mismo tiempo les daban la responsabilidad de mantenerlos, lo cual requería de gastos importantes, complicando su economía.

Para ti la política puede ser un elefante blanco, te puede dar el honor de representar al pueblo donde naciste, pero también representa un gasto financiero desbordado si se hace tradicionalmente. ¿Cómo recibir un elefante blanco sin que éste sea una complicación?

Hace unos años llevaste el curso de “competencias gerenciales” en la Universidad del Pacifico. Allí te enseñaban a controlar el carácter y los impulsos ¿cómo permanecer tranquilo ante altas situaciones de estrés o hechos sorpresivos?  El proceso pasa por hacer una lista de las cosas que te sobresaltan, pueden perturbarte o sorprenderte (los gatillos) luego hay que definir un mensaje interno que te permita controlar las emociones (decirte algo así como: esto ya pasó antes y debo reaccionar mejor). Esto que parece teórico, funciona si se pone en práctica por unos meses y al final hay buenos resultados. Pero uno de los elementos claves para que esto funcione es que una persona, a quien tienes respeto y consideración, debe monitorearte; siempre debes conversar con esa persona y ponerlo al tanto de tus avances y retrocesos.

El proceso anterior sirve en la política también. ¿Cómo entrar en política sin que ésta acabe destruyéndote, sin que tengas que perder el alma y sin llegar al caos financiero? ¿Qué situaciones debes evitar y qué gatillos controlar, qué persona debe monitorearte?.

Cuando niño era fácil encontrar la felicidad temporal; bastaba ir al cine, comer tu plato favorito, ir a la feria o a la playa.  Es envidiable esa felicidad y la satisfacción lograda con cosas tan simples. Cuando avanzas en la vida, no olvidas la emoción de tu primer departamento o primer vehículo, pero cada vez se hace más difícil conseguir un alto grado de satisfacción. Siempre existe el riesgo de ingresar a una carrera de querer más y mucho más para sentirse bien.

La política bien utilizada puede brindar un alto grado de satisfacción, una gran oportunidad para autorrealizarse, trascender más allá de tu entorno cercano. Sin embargo también hay riesgos que controlar y elefantes bancos que saber mantener. Todo es posible.

13 de octubre de 2015

LA SAL DE LA TIERRA DE MARAS

Los relatos bíblicos mencionan (Mateo 5:13) una frase que dijo Jesús a sus discípulos "vosotros sois la sal de la tierra” quizás en alusión a que la sal evita que las comidas sean insípidas o porque conserva algunos alimentos evitando su deterioro a condiciones del ambiente. Esto es muy diferente al uso peyorativo que le damos a la sal actualmente “estás salado”.
Por Angel Manero
La sal fue utilizada en tiempos del Imperio Romano para pagar a los soldados que custodiaban la ruta de la sal, dando uso a la palabra en latín “salarium” del cual proviene el término castellanizado salario.
La sal comercial proviene mayormente del agua de mar, aunque también hay lagos y ríos salados en el continente (en estos casos hay que evaporar el agua para obtener la sal cruda) también se obtiene sal de las minas donde la hayamos cristalizada.
Existen sales gourmet famosas en el mundo, que se utilizan en alimentación, como la sal del mar muerto, la sal del Himalaya y últimamente se está desarrollando mercado para nuestra sal de Maras que se produce en el Cuzco. Estas tres sales buscan diferenciarse de la sal ordinaria, obtenida industrialmente del agua de mar (requiere refinación a altas temperaturas) por su atributo de artesanal o natural.
Según TRADEMAP en el grupo de partidas que incluye sal de mesa, sal de cocina y sal industrial; el primer importador mundial en el año 2014 fue Estados Unidos con USD 589 millones, seguido de Japón con USD 430 millones y tercero China con USD 340 millones. Para el mismo año, el primer exportador mundial fue Países Bajos con USD 315 millones, seguido de Canadá con USD 198 millones y en tercer lugar Alemania con USD 197 millones.
El Perú exportó - en el 2014- USD 14.7 millones en sal; siendo Estados Unidos con USD 11.5 millones el principal destino, sigue Colombia con USD 2.3 millones y tercero Ecuador con USD 481 mil. Es casi imposible determinar el monto exportado de sal de Maras.
La sal de Maras se produce, desde el tiempo de los Incas, en la comunidad de Maras a 50 Km. del Cuzco. El agua salada emana de fuentes subterráneas que alimentan más de 4 mil pozas (de 5 cm. de alto) la poca profundidad permite la evaporación rápida del agua y el constante recojo de la sal en épocas sin lluvia. Estas pozas de evaporación son de propiedad de las familias de la comunidad y se han heredado de generación en generación. Cada poza puede producir entre 200 y 300 kilos de sal al mes.
La palabra quechua “cachi” se traduce como “sal” en castellano y para más información; según una leyenda de fundación del Imperio Incaico, uno de los hermanos Ayar (Ayar Cachi) al verse convertido en cerro y viendo que su hermano Ayar Manco sería el iniciador del Imperio, estalló en llanto, heredándonos estos manantiales de agua salada.
Hace unos años ESSALUD sacó un comunicado “El Seguro Social de Salud recomienda el consumo de la sal rosada o sal de Maras para aquellas personas que padecen de presión arterial alta debido a su bajo contenido de cloruro de sodio”.
Sobre lo anterior, he estado buscando información y no encuentro base técnico-científica para creer que sal de Maras tiene bajo contenido de cloruro de sodio; supongo que debe tener una cantidad ligeramente menor dado que al no refinarse, no se han eliminado los elementos adicionales presentes en el medio como magnesio, calcio y otros. Aquí hay una línea de investigación necesaria para darle a este recurso natural el sustento técnico necesario para una correcta promoción.
En mi reciente visita a Maras, pude ver que le agregaban Yodo a la sal y me pareció ilógico que al buscar posicionarse como una sal natural, se le agregue un aditivo. Posteriormente he encontrado que la OMS recomienda la adición del yodo a la sal: “la insuficiencia de yodo da lugar al hipotiroidismo, una enfermedad caracterizada por aumento de peso, debilidad y agrandamiento de la glándula tiroides (dicho agrandamiento se denomina “bocio”). La deficiencia de yodo constituye un importante problema de salud pública, especialmente en mujeres embarazadas, bebés lactantes y niños pequeños y en edad escolar, ya que una deficiencia prolongada durante el desarrollo provoca lesiones cerebrales irreversibles y retraso mental”.

3 de octubre de 2015

EL ESPÁRRAGO PERUANO

Según TRADEMAP en el 2014, el mundo importó USD 1,260 millones en espárragos frescos. Destaca Estados Unidos como el mayor importador con USD 502 millones, sigue Alemania con USD 109 millones y Canadá con USD 83 millones. Para ese mismo año, el principal país exportador ha sido Perú con USD 384 millones, seguido de Méjico con USD 246 millones y Estados Unidos con USD 147 millones.
Autor: Angel Manero
En el 2014 se importaron, en el mundo, USD 378 millones en espárragos preparados o en conserva. España lidera las importaciones con USD 129 millones, le sigue Francia con USD 69 millones y Alemania con USD 58 millones. Para ese año el principal país exportador ha sido China con USD 165 millones, seguido cercanamente de Perú con USD 150 millones y en tercer lugar Países Bajos con USD 30 millones.
En ambas categorías, frescos y en conserva, el Perú exportó USD 534 millones en el 2014. A este dato habría que sumarle los USD 37 millones que Perú exportó en espárrago congelado (ADUANAS) totalizando USD 571 millones de exportación en las tres categorías siendo, indiscutiblemente, el primer exportador de espárragos en el mundo.
A mediados de los 80s, la región sureña de Ica validó el cultivo de espárragos (variedad UC157) en esa zona, con apoyo financiero de USAID para producir y exportar espárrago verde en fresco. En esa época empieza la historia ascendente de la industria esparraguera peruana que nos ha llevado, a la fecha, a superar las 30 mil hectáreas (Has) sembradas y liderar mundialmente en productividad con una cosecha promedio anual de 11.4 TM/Ha (INEI). Cabe indicar que Méjico tiene un rendimiento de 7.1 TM/Ha. y Estados Unidos 3.5 TM/Ha (FAOSTAT).
La alta productividad de nuestras plantaciones y un marco macroeconómico más promotor de inversiones con la liberalización del mercado de tierras; nuevos proyectos de irrigación como CHAVIMOCHIC que permitía tener tierra disponible a bajo costo (aprox. 1,000 USD/Ha) también el fortalecimiento de la autoridad sanitaria peruana (SENASA) que permitió negociar los acuerdos fitosanitarios; y la Ley de Promoción Agraria (15% impuesto renta y disminución de cargas laborales. Vigente hasta el 2021) hizo posible que las inversiones privadas llegaran –cerca de USD 900 millones-. Fue un proceso sui generis porque los inversionistas no eran agricultores especializados sino empresarios de otras actividades como la minería, farmacéutica, comercio, textil y pesca. A esto debemos sumar dos catalizadores que han sido Frío Aéreo y el IPEH.
Méjico compite con Perú en la exportación en fresco a Estados Unidos. El factor del bajo costo de transporte a este mercado, le otorga un diferencial competitivo aproximado de 0.75 USD por kilogramo exportado; lo cual representa un diferencial algo superior a la fortaleza que tiene Perú de tener una mayor productividad en campo (en promedio 0.50 USD/Kg de costo más bajo por kilo).
Adicionalmente, el tipo de cambio se ha establecido como la principal ventaja mejicana. Según la SBS el tipo de cambio para la moneda peruana fue de 2.8 soles (S/) por dólar a inicios del 2010; a inicios del 2015 fue de S/ 3.0 por dólar, y al 30 de setiembre del 2015 es S/ 3.2 por dólar. En Perú el tipo de cambio se ha fortalecido 14% en los últimos 5 años y 7% en lo que va del año 2015. Para los mismos periodos el tipo de cambio mejicano se ha apreciado en 32% y 15% respectivamente.
La historia ha demostrado que es necesario seguir impulsando los esfuerzos de coordinación empresarial para seguir ganando competitividad. La tendencia parece ser de consolidar las compañías bajo una plataforma comercial única que pueda desarrollar y penetrar mercados con más eficacia. Si esta coordinación no se da, veremos pronto un proceso de compra y fusión de empresas productoras.

24 de septiembre de 2015

TU ENVIDIA SECRETA

Serie: Relatos cortos (9/10)
Por Angel Manero

TU ENVIDIA SECRETA

Victoria Santa Cruz, hermana de Nicomedes, en su homenaje a la Marinera Limeña decía “la danza es orgánica, sentida, brota del alma del ser… es eso que no se remeda, que no se cuenta 1,2,3”. No podrías estar en desacuerdo con Victoria, pero tu caso debe ser algo excepcional, eres aficionado a escuchar todo tipo de música, recuerdas incontables composiciones, reconoces la melodía apenas empieza una canción; pero el bailar, es un verbo muy ajeno a ti.

Tal vez, se te pasó escuchar una fábula o existe una hoja perdida de la biblia que diga que Dios creó al hombre y dispuso que a cada persona se le asigne un don, una sola habilidad, y los demás dones los debía adquirir con mucho esfuerzo. El don del baile no te fue entregado y para confirmarlo te bastará recordar aquella fiesta tradicional del “Santiago” en Junín cuando el maestro de ceremonia mencionó que bailabas rock de los 80s, o aquella vez donde te dijeron que bailas como un árbol.

Para ti, que presumes de ser cañetano donde vas, es una carga haber nacido en la capital nacional del arte negro, cuando se trata de bailar un festejo. Desconoces los motivos de tu incompetencia en esta materia, quizás te faltó practicar de joven.

Cómo olvidar tu primera fiesta oficial, el año nuevo de 1993, saliste a bailar y de pronto todos en la pista de baile se movían de un lado para otro, casi en simultáneo hacían coreografías. Te pareció que había una cámara oculta filmado una broma, acaso tus amigos te habían preparado una "emboscada". Lo bueno de ti fue que sin importar la coreografía grupal, seguiste bailando a tu modo. Después te enteraste que aquella canción era el famoso “meneíto”.

Ismael Rivera, tenía una divertida canción “Yo no soy médico, ni abogado, ni tampoco ingeniero, pero tengo un swing, que muchos quisieran tener… yo casi no sé escribir, yo casi no sé ni leer, pero tengo un swing” y no es que los profesionales no sepan bailar, pero sospechas que de todos ellos, los ingenieros son los menos cadenciosos en cuanto a ritmos populares.

Al parecer, a absolutamente todas las mujeres les gusta bailar y no hay forma de escaparse de la pista de baile, como tampoco la había en la infancia, cuando las tías te obligaban a bailar con las niñas en las matinés.

De los siete pecados capitales (lujuria, ira, orgullo, codicia, pereza, gula y envidia) quizás del último no te escapas, porque debes reconocer que secretamente, y a tu modo, envidias a esos “malditos” bailarines de cada fiesta.

23 de septiembre de 2015


CONCURSO ESCOLAR “RELATOS DE MI TIERRA”
BASES:
1. Participan los estudiantes de colegios secundarios públicos y privados de toda la provincia de Cañete.
2. Cada estudiante concursante debe tener un profesor asesor para que le brinde soporte en la redacción de su relato.
3. El relato tendrá 1,000 palabras como máximo, será presentado en formato “word“ y debe ser parte de la experiencia de vida del estudiante (es indispensable que el relato considere una historia real).
4. El relato debe resaltar un aspecto positivo de la provincia de Cañete; por ejemplo de su historia, atractivos turísticos, atractivos culinarios, expresiones artísticas, logros deportivos o cualquier otro aspecto que nos haga sentir orgullosos de nuestra tierra.
5. La fecha máxima de entrega de los relatos será la medianoche del 28 de noviembre del 2015 y debe enviarse vía e-mail a: relatos@angelmanero.com (El documento debe incluir los siguientes datos del estudiante y asesor: nombres completos, edad, número de DNI, colegio y teléfono de contacto).
6. Los resultados se publicarán en www.facebook.com/angelmanero el 4 de diciembre y la ceremonia de premiación se realizará el 11 de diciembre del 2015.
7. Los relatos serán evaluados por el Ing. Angel Manero
8. Los premios serán repartidos, en partes iguales, entre el estudiante y el profesor asesor. Ellos son:
Primer Lugar: 3,000 soles
Segundo Lugar: 2,000 soles
Tercer Lugar: 1,000 soles
9. Los relatos ganadores serán publicados en versión digital e impresa para conocimiento de la población.
CATEGORIA ESPECIAL
Se añade una categoría especial donde pueden participar individualmente cualquier ciudadano de la provincia (DNI con dirección o nacimiento en Cañete). El premio para esta categoría será de S/ 1,500 y solo será premiado el primer lugar. Esta categoría no requiere de un asesor.
(*) Consultas e informes: relatos@angelmanero.com

15 de septiembre de 2015

EL PRESIDENTE TIENE UN JARDÍN CON UNA FUENTE

Serie: Relatos cortos (8/10)
Por Angel Manero

EL PRESIDENTE TIENE UN JARDÍN CON UNA FUENTE

En la primaria, se solía leer los versos de José Martí, en particular aquel famoso “Cultivo una rosa blanca, en junio como en enero, para el amigo sincero que me da su mano franca”. En otro poema también se refiere a la amistad "Tiene el leopardo un abrigo, en su monte seco y pardo, yo tengo más que el leopardo, porque tengo un buen amigo" y en otro párrafo “Tiene el señor presidente, un jardín con una fuente, y un tesoro en oro y trigo. Tengo más, tengo un amigo”.

Cuando piensas en la labor de un Presidente, imaginas la soledad del poder. Todos vienen a pedir algo, ya sea una instrucción o por lo general un pliego de reclamos. Siendo Presidente, en un país presidencialista como el nuestro, no se tiene a nadie por encima. El Presidente carga el peso de las decisiones sobre sus hombros.

La primera vez que te reuniste con un Presidente o casi Presidente, fue con Alan García, quien acababa de ganar las elecciones del año 2,006. Habías recibido una invitación para aportar sugerencias sobre cómo implementar Sierra Exportadora, institución que fue una promesa de campaña electoral. Tenías una propuesta de fondo de financiamiento concursable, la cual tenía un componente reembolsable y otro no reembolsable, una especie de fondo MIVIVIENDA para inversiones agropecuarias. Te sorprendió la completa atención que ponía el Presidente a la presentación y tomaba notas de todo; acabada la misma, dio una instrucción para que pasen los periodistas que esperaban afuera. En frente de unos 30 periodistas, el Presidente agradeció la visita y en 30 segundos resumió perfectamente todo lo expuesto. Después te dejó para que declares a los medios.

Meses después recibiste una llamada del Ministro de Agricultura, Chiquitín Salazar, invitándote a una reunión para conversar sobre la nueva política del Banco Agropecuario. Te tomó unos minutos entender lo que pasaba; y es que al siguiente día salía tu nombramiento como Director del Banco Agropecuario. Fue una noticia inesperada.

Después en el 2,007, tuviste tres reuniones más con el Presidente García, siempre para proponer asuntos de desarrollo del sector agro. Era destacable las instrucciones que él mismo daba al final de cada reunión; en particular una en que hizo regresar a la oficina a un alto funcionario público, para que te reciba a las 9.30 pm.

En el año 2,009, tuviste un punto de quiebre en tu cercanía con palacio de gobierno; cuando el gobierno aprista optó por abrir camino al cultivo de plantas transgénicas en el Perú. Estabas en desacuerdo y debiste alejarte.

Hoy en día se hacen cuestionamientos a la gestión del Presidente García; son temas que se deben investigar y llegar a la verdad de las responsabilidades;  sin embargo el Alan García que conociste fue álguien que se esforzaba por hacer las cosas bien, a pesar de algunos pésimos ministros que tuvo.

Con el Presidente Humala, tuviste una relación más personal que profesional, dado que tus hijos estudian en el mismo colegio que sus hijos. Casi nunca compartías la visión de desarrollo país de Ollanta Humala (antes del 2011) sin embargo lo reconoces como una persona bien intencionada, que tenía la convicción de mejorar radicalmente al Perú.  

¿Quién será el próximo Presidente? Es imposible saberlo, pero tienes la impresión que será álguien que en este momento es desconocido por la mayor parte de los peruanos; lo cual tiene su lado positivo porque lo nuevo trae esperanza y también su lado negativo porque no tendría experiencia de gobierno. 

12 de septiembre de 2015

El mejor consejo que jamás oí

Serie: Relatos cortos (7/10)
Por Angel Manero

El mejor consejo que jamás oí

Tu tía solía regalarte unas viejas revistas “selecciones del Readers Digest” gracias a ellas, desde la paz de la campiña cañetana, recibías el mundo a través de la lectura.  En aquella revista había una sección “El mejor consejo que jamás oí ” donde se relataban historias de personas que habían recibido, sin buscarlo o esperarlo, lecciones trascendentales para su vida.

En 1,998 te encontrabas estudiando, gracias a una beca, una especialidad vinculada a los Agronegocios en la Universidad San Ignacio de Loyola. Estudios que complementaban tu formación previa en la Universidad Nacional de Ingeniería. Te era imposible estar lejos del agro, por más que te hayan dicho que no se ganaba plata en la agricultura; leer una noticia sobre el campo, ver un frutero en la calle o cualquier alimento fresco te hacia evocar tus tiempos de “La Huerta” familiar y te llamaba la vocación agraria como te llamaría el afecto impostergable de la mujer amada.

Para mantener tu beca en la universidad, debías de mantener el primer puesto en toda la facultad y eso era perfectamente posible. Llegó el momento de hacer prácticas pre-profesionales y la universidad te envió a La Libertad, al proyecto CHAVIMOCHIC, a una plantación de espárragos. Viajaste con tus pergaminos de estudiante destacado y cuando llegaste al centro de producción, encontraste que estaba en medio del arenal, no había árbol alguno que dé sombra y en el borde del predio había unas montañas de guano que estaban en tratamiento con millones de moscas morando alrededor. Llegaste a la hora del almuerzo y la proveedora repartía sus tapers de plástico con comida fermenta por el sol; apenas se abría un taper las moscas llegaban por miles.

La impresión que tuviste al llegar fue bastante mala. Estabas enfadado con la universidad ¿cómo era posible que a sus mejores cuadros les den estas plazas de prácticas? ¿cómo se puede trabajar en este ambiente que era lo opuesto a tu hermosa y agradable campiña cañetana?  Decidiste retirarte de allí y regresar a Lima; y mientras esperabas que un camión descargue su mercancía para que te dé un aventón hasta Trujillo; compartiste tu molestia con el chofer del mismo, quien sin decirte está bien o está mal te relató una historia “Mi hijo se fue a trabajar a una empresa minera en Cerro de Pasco como aprendiz de mecánica. Al llegar a la empresa encontró que el taller de maestranza era muy desordenado y medio abandonado, la altura y el frío eran insoportables, además el ambiente de trabajo no era bueno. Mi hijo me llamó y me dijo: Papá me quiero regresar. Entonces le dije que siempre lo iba a respaldar en sus decisiones, pero piénsalo bien antes de irte, dado que en las empresas con problemas aprendes más que en cualquier otro lado”.

No sabes en qué quedó la historia del hijo del chofer del camión. Pero el hecho es que te dejó dudando ¿y si aquí aprendería mucho? ¿y si esto es parte de un camino que hay que recorrer para llegar después a mejores destinos?

Te quedaste, y prácticamente te convertiste en administrador del fundo. A los pocos días de tu llegada, hubo una huelga de personal. Los cerca de 100 cosechadores querían que se les aumente el jornal diario y disminuya el tareo de trabajo. Algo que elevaba en cerca del 30% el costo de cosecha, lo cual era imposible de asumir dado que el espárrago blanco estaba con bajos precios -menos de USD 0.75 por kilogramo promedio en chacra- qué hacer frente a esta crisis de personal. Trataron de negociar y no se pudo, es difícil negociar cuando estás en plena cosecha. Traer gente de otro lado era casi imposible dado que no había personal disponible en la zona. Entonces hicieron lo impensable; trajeron personal desde Chincha donde había acabado la campaña de cosecha, estos cosechadores cobraban un poco más pero tenían un rendimiento mucho mayor; y para dormir les armaron un campamento al pie del fundo. La crisis laboral a fin de cuentas los llevó a bajar los costos de cosecha y les dio un status de celebridad en la zona.

Poco a poco fueron mejorando las condiciones, cambiaron al proveedor de almuerzos, construyeron un comedor anti moscas (funcionó parcialmente pero ayudó bastante) implementaste reportes de cosecha en Excel, lo que permitió llevar un sistema de costeo diario. En resumen, el aprendizaje fue importante, con creces valió la pena quedarse y todo gracias a una persona que sin decírtelo, te dio quizás, el mejor consejo que jamás oíste.

11 de septiembre de 2015

EL EXAMEN DE ADMISIÓN

Serie: Relatos cortos (6/10)
Por Angel Manero

EL EXAMEN DE ADMISIÓN

Una extendida huelga de profesores hizo que acabaran la secundaria en febrero de 1992.  Para ese entonces no pensabas en fiesta o viaje de promoción, lo urgente era prepararse para la universidad cuyo examen de admisión era en pocos días. Esperabas que sea de ayuda el haber obtenido el primer puesto en toda la educación secundaria, lo cual te permitía competir en la categoría de “exonerados” en el examen de admisión a la Universidad Nacional de Ingeniería. Se suponía que los primeros puestos del colegio entraban directo a la universidad, sin embargo con tantos colegios en el país, había que competir para ingresar.

Llegó el día del examen y respondiste muy pocas preguntas, nunca habías tenido una evaluación tan difícil en tu vida. Álgebra, aritmética, geometría, trigonometría, física y química se sumaban al razonamiento verbal y matemático; tres días de exámenes y acabaste sacando tres puntos en una escala del 0 al 20. El primer puesto de la categoría de “exonerados” había sacado cerca de 16 y el último que ingresó a Ingeniería de Sistemas sacó cerca de 14;  allí te diste cuenta que no había ventaja postular como “exonerado”; eran los mismos puntajes que alcanzaban los postulantes de la categoría “ordinarios” para ingresar.

Había que prepararse para el examen del año siguiente. ¿Pero qué significaba prepararse? Para empezar una buena academia, aquella que había logrado la mayor cantidad de ingresantes a la carrera que postulas. Ingresar a la especialidad de Ingeniería de Sistemas tenía en ese momento una probabilidad de 60 a 1, es decir por cada sesenta postulantes uno ingresaba. ¿Y qué hacia ese 1 para ganarle a los otros 59?

La academia era importante, no perder una hora de clase era importante, pero igual de importante era practicar fuera del horario de clases. En la academia estudiaban 8 horas diarias y había que dedicar no menos de 8 horas en casa para complementar. No solo se debía aprender a resolver los problemas, también debías hacerlo con rapidez.

Un año de duro estudio y mucha práctica, de lunes a domingo, sin distracciones. Fue hasta cierto punto un proceso importante en tu vida, pero así como la guerra cambia a un soldado, tener un proceso de estudio demasiado intensivo, también tiene sus consecuencias. Tanta presión y concentración te había llevado a una especie de bloqueo emocional, necesario quizás para dar un examen sin ansiedad o nerviosismo, pero se había hecho a costa de insensibilizarse en cierto grado.

Salieron los resultados del examen de admisión y al verlos, un gesto de descontento, leíste segundo puesto; más que suficiente para ingresar pero te habían ganado el primer lugar. Habías ingresado y no tenías una gota de alegría o alivio en tus venas, habías ingresado y el bloqueo emocional aún seguía. Tardaron varios días para normalizar tu estado de ánimo y disfrutar del logro.

Aún después de muchos años te preguntas si valió la pena. Y no es que la vida no requiera hacer sacrificios, sino que ¿valió la pena que fuera alrededor de los 16 años habiendo tenido que dejar la casa familiar para mudarte a otra ciudad?

Ahora en Cañete hay universidades y eso es bueno, sin embargo hay que llevarlas a ser grandes centros de estudios, para que valga la pena quedarse en la provincia a estudiar y una vez acabados los estudios superiores, estar listos para emprender otros rumbos y también preparados para dejar el hogar.


8 de septiembre de 2015

EL CONCURSO

Serie: Relatos cortos (5/10)
Por Angel Manero

EL CONCURSO

En el año 1,987 ingresaste al Colegio Nacional de Imperial -CNI- el primer año de secundaria tenía siete secciones, cuatro más que tu colegio primario.  El CNI era un espacio que reflejaba la sociedad de aquel entonces; allí estudiaban alumnos que provenían de familias acomodadas como los que no; estudiaban alumnos muy tranquilos y también los muy inadaptados;  todos revueltos y no había mayores problemas.

Un ritual de todos los años era el concurso de matemáticas tanto en la fase provincial como en la regional.  Siempre participabas por tu grado, y en un grado mayor participaba  Omar Y. y en dos grados mayor Pedro B. El Colegio tenía un gran equipo para competir y de hecho obtenían resultados bastante aceptables en la general y algunos primeros lugares.

Dos o tres meses previos a cada concurso había que prepararse con el profesor asignado. Una hora extra diaria para el estudio y ustedes eran unas esponjas, aprendían todo. Un día antes del concurso había que pasar el sombrero por los salones para recolectar dinero para los gastos del traslado y otros (había colaboración de los estudiantes). Lo más probable es que los profesores tutores no recibieran un incentivo monetario para prepararlos a ustedes, había sacrificio por el colegio, lo cual era resaltable pero no suficiente.

Años más tarde, después de haber ingresado a la UNI, te encontraste con algunos estudiantes que habían competido contigo y descubriste que había otro mundo alrededor de las matemáticas. Estudiantes que se preparaban en academias pre-universitarias desde el tercer año o colegios que contrataban equipos especializados de profesores o aportes que hacían los padres de familia para contratar profesores asesores.

No es que sus profesores o sus padres no hayan querido brindarles una preparación mejor; quizás no era un tema relevante o tal vez no había una persona que asuma el liderazgo en este asunto, que ponga las metas altas y que conozca la estrategia para ganar. Te diste cuenta que la frase “lo importante es participar” no es suficiente y mencionarla aislada hace daño. Es importante participar pero también lo es "salir a ganar" y para salir a ganar hay que tener estrategia y esfuerzo. Hay que evitar llenarse los bolsillos de guerras perdidas.

El equipo que tenía el CNI en matemáticas demostró años después, en los exámenes de admisión a las mejores universidades, que estaban entre los primeros del país ¿Qué había cambiado? pues simplemente una buena preparación en el lugar indicado.

Conociste lo competitivo que se ha vuelto la vida, y también que todos están es posibilidad de ganar. Las cosas van mejor cuando encuentras a álguien que los ayuda a definir el camino, álguien que conoce de triunfos. Cuando compites y no ganas, no te consuelas rápidamente, tienes una noche oscura de reflexión, pero allí queda, al siguiente día habrá nuevos retos que enfrentar.

La vida no te dejó de enseñar, y como dice la canción “maestra vida camará, te da y te quita, te quita y te da" En algún tiempo estabas en el mejor momento profesional y personal; y de pronto la salud te complicó unos años y de nuevo a replantearse. Entonces, es importante salir a ganar en lo que venga; pero también se debe mantener un balance personal en lo familiar y en lo espiritual; aunque estos últimos sean los concursos más difíciles de afrontar. 

7 de septiembre de 2015

La Huerta

Serie: Relatos cortos (4/10)
Por Angel Manero

La Huerta

Uno de los grandes beneficios de vivir en el campo es que tienes espacio para todo. Tenías tu casa al pie de la chacra grande -que era del abuelo- y había un pequeño terreno sin aprovechar que fue utilizado anteriormente para criar cerdos, unos chanchos enormes que eran capados a temprana edad para evitar un olor desagradable en su carne. Se vendieron los cerdos y quedó un terreno fertilizado naturalmente.

En la chacra grande se cultivaba algodón y en rotación podía ir el maíz choclo, maíz morado o maíz amarillo, en algunos casos menestras o maní de corto periodo. El algodón marcó una época, cuando llegaba la cosecha todos participaban; tu abuelo los despertaba antes de las 5 a.m. y a esa hora el rocío de la mañana acababa por humedecer toda ropa que llevaban. Salir en grupo a cosechar era una actividad de camaradería; era un lujo ver a grandes cosechadores en acción; personas que podían recoger hasta cuatro quintales de algodón por día, es decir cuatro veces lo que tú recogías.

Deberás reconocer que eras uno de los peores cosechadores. El abuelo te compensaba dándote la tarea de llevar los pesos y obtener – sin usar calculadora –  lo que había que pagarle a cada trabajador.  Lo bueno de la agricultura es que da mucho empleo y en este caso la cosecha de algodón era uno de los principales ingresos del año en el vecindario. Los agricultores no se hacían ricos con las cosechas pero daba lo básico para vivir.

En marketing, un “océano azul” se da cuando no existen competidores y puedes navegar sin chocar. Encontraste tu océano azul en el cultivo de algodón, cuando viste que en Imperial había un local que compraba la pelusa  –restos sucios de algodón que se encontraban en el suelo de la plantación o eran descartados al momento de seleccionar el producto para su venta.  Solo era cuestión de salir a recoger y varios sacos vendidos te generaban un ingreso mayor al que ganaban los adultos por jornada de labor.

Al final de la cosecha, quemar los restos secos de la plantación era una oportunidad para la fogata y la posibilidad de asar choclos, camotes o tostar maní en las cenizas que quedaban. No hay mejor comida que la que se come cuando uno está con hambre, pero una experiencia culinaria se hace perdurable cuando se realiza en el mismo campo de cultivo.

Con parte del agua que salía de la chacra grande, habilitaron la huerta familiar. Encontraron un vendedor de semillas en el mercado de Imperial, en la Av. Ramos cerca a Dos de Mayo. Semillas de apio, poro, culantro, perejil, col, col china, coliflor, nabos, zanahorias, betarragas, lechugas, cebolla roja, cebolla china, pepinillos y calabazas estaban disponibles.  Era una maravilla poner una semilla y en 30 días tener un alimento listo para la cocina.

La huerta fue un éxito productivo. La abundancia llega, pero no necesariamente la abundancia económica. ¿Qué harían con 50 enormes apios o 50 coliflores? una familia consume muy poco por semana. A veces llevabas tus productos y se los ofrecías a los vendedores de verduras. Era interesante ver cómo los mercados son sensibles a la oferta, cuando hay muy poco producto te pagan bien y conforme aumentan los envíos te bajan los precios.   

La huerta, sin quererlo, te resultó un laboratorio para entender “en pequeño” todo lo que pasa “en grande” con la agricultura nacional. La elasticidad de la oferta y demanda, la negociación, la diversificación, el enfoque de mercado, la dedicación a los cultivos son asuntos que se entienden mejor si has sido parte de ellos.  Pero por sobre todas las cosas, la huerta te permitió conocer de cerca y a corta edad, esa maravilla de crear vida, de plantar semillas y trabajar para la cosecha, de experimentar lo que se siente cuando las cosas no salen bien y que no hay lamentación que valga.

5 de septiembre de 2015

La Bicicleta

Serie: Relatos cortos (3/10)
Por Angel Manero

La Bicicleta

Te trae la memoria el día que conociste al botellero, aquel divertido personaje que cambiaba las botellas por pollitos. No sabes si te estafó, te dio un pollito por cada dos botellas -tus amigos decían que era uno por botella- Pero eso no importaba; tenías seis pollitos en una caja y había que abrigarlos. De aquellos seis, cinco llegaron a ser grandes pollos de plumas blancas, distintos a los coloridos pollos de corral.

Criar pollos era muy simple agua, maíz partido, algo de “nicovita”; lo mismo pasaba cuando criaban patos, conejos o cuyes. Aunque para estos últimos había que recoger, todos los días, algo de hierbas silvestres en el campo para alimentarlos. La sabiduría popular va enseñando qué plantas recoger; no es lo mismo “yuyos” o “grama” que los otros pastos resinosos que evitabas. También había que detectar si habían fumigado los campos para no acabar matando a los animales.

Todo bien, hasta que llegó Juliana, vuestra vaca. Una enorme “Holstein” a la que había de alimentar mañana y tarde para poder obtener 15 litros de leche por día. Sustentar una vaca puede resultar lo mismo que criar 100 conejos. Pero el gran problema de tener una vaca fue sufrir que sus hijos pequeños –terneros- sean vendidos al nacer porque no había forma de criar otro vacuno en casa.  

Pasaron los años y Juliana debió ir al camal. Esa es la naturaleza del campo, no puedes tomarle cariño a los animales que son comestibles. Juliana se fue, pero les quedó la maravillosa costumbre de tomar leche fresca en las mañanas. Entonces se hizo el milagro, apareció en tu casa la bicicleta que siempre quisiste tener; sin embargo, como bien lo enseña la vida “no hay beneficio sin sacrificio”. La bicicleta llegó para fines de recreación, pero también para que te levantes más temprano y vayas, todos los días, al establo lechero de Hualcará a comprar la leche para el desayuno.

La tienda de Don Lucas era una de esas grandiosas tiendas de barrio donde encontrabas de todo. Abarrotes, carnes, frutas, verduras, golosinas, útiles del colegio, kerosene, alcohol y desde luego el pan de cada día. Por un tiempo no llegaba pan francés; la dificultad del país con las importaciones de trigo dejó como única opción al llamado “pan popular” que a nadie le gustaba. Pero como no hay “bien sin mal” tampoco hay “mal sin bien” y entonces, el desayuno se convirtió en una experiencia gastronómica de papas, camotes, yucas, quesos y se hacían más frecuentes las maravillosas "torrejas cañetanas".

Por alguna razón ya no se podía obtener leche fresca en el establo de Hualcará, y cuando creías que descansarías de esa rutina diaria; tu madre se encargó de recordarte que siempre hay algo que hacer y esa bicicleta debía ser aprovechada. Resulta que al costado del Municipio de Imperial empezó a llegar, todas las mañanas, un vendedor de pan francés a precios bastante aceptables. Debías ir muy temprano porque había cola, y desde luego, la bicicleta estaba allí para usarse.

No es que la bicicleta te traiga malos recuerdos, todo lo contrario, con ella solías pasear por los campos de “El Conde”, llegar a bañarte en el canal de la irrigación de Nuevo Imperial o llegar hasta el rio Cañete por Montejato; conocer Cerro Candela, Cerro Alegre, San Benito, Quilmaná, La Quebrada, Carmen Alto, La Florida y los extensos campos de Herbay. La bicicleta te permitió conocer tu tierra de modo más cercano, pero por sobre todas las cosas: la bicicleta te enseñó a ser parte de tu familia, a que debes colaborar y participar para el bien de todos y en ese proceso acabarás divirtiéndote.

4 de septiembre de 2015

El Pañuelo

Serie: Relatos cortos (2/10)
Por Angel Manero

El Pañuelo

El centro educativo 21001 –ahora Zoilo Candela Sánchez- se ubica en la Urb. Ramos Larrea de Imperial. Para llegar allí, todos los días, debías de caminar cerca de 30 minutos. Sufrían los zapatos, por lo que debías llevar una escobilla para limpiarlos antes de entrar al colegio. Supongo que te matricularon allí porque tus hermanas estudiaban la secundaria en el colegio vecino “El Carmen”.

El 21001 era un colegio de unas 10 aulas, y fue todo un suceso la vez que los padres de familia construyeron, con diversas actividades, dos aulas adicionales. Para ese entonces conociste por primera vez lo que era una “parrillada” y una “frejolada con seco” pro-fondos.

El camino al colegio era una ruta acompañada de anuncios. En algún lugar se promocionaba la venida de un tal “Chacalón” en otro tiempo “Los Shapis con Chapulín”; años después comprenderías la importancia de estos personajes en la historia nacional de la música popular. En el colegio "El Carmen" había un letrero enorme que decía “El que estudia triunfa” y en un mural de tu colegio: “Yo quiero que me enseñe un maestro de verdad, que hábil maneje la tiza y defienda la igualdad…”.

Fue el año 1981 cuando ingresaste al primer grado con menos de 5 años. Para que te acepen, el director Zoilo Candela te tomó un examen. Te llevaron al aula y encontraste una niña de compañera de carpeta, el profesor Chung dibujaba algo en la pizarra. Había que copiar los dibujos en el cuaderno y descubriste que no podías hacerlos, aún recuerdas ese desconcierto del primer día; sin embargo la niña del lado hacía unas figuras perfectas; le pediste ayuda y ella te enseñó. Cómo olvidarla  –Ana María Q.- Al finalizar el primer año, te alegraste cuando en la clausura la llamaron para entregarle un diploma de primer puesto; y la sorpresa fue que el segundo puesto te lo dieron a tí. No podía ser de otra forma, si hacías lo mismo que ella.

Años después, empezaba el gobierno aprista, hecho que no cortó las sufridas huelgas de profesores. Pero había un profesor “de la estrella” que no hacia huelga y te metías a su clase. El profesor Mejía era un tipo ameno y exigente, al que por no hacer huelga le decían “amarillo”.

Había mucha diversión en el patio del colegio. Un día jugaban “La lleva” que consistía en atrapar al compañero. El problema de correr velozmente es que si te caes hay complicaciones, y en una caída te rompiste la ceja. Enormes cantidades de sangre te brotaron, tratabas de contenerla con la mano pero no se podía; álguien te alcanzó un pañuelo, luego te llevaron a la posta médica del jirón Sucre y te cosieron la herida.

Al día siguiente, al salir de tu casa para el colegio, tu madre te entregó el pañuelo lavado y planchado para que se lo entregues al propietario. Pero ¿Quién era? No recordabas quién te dio el pañuelo, preguntaste y nadie sabía. Llevaste el pañuelo varios días al colegio esperando que el propietario aparezca. Como resultado, te acostumbraste a usarlo y desde entonces y hasta ahora llevas pañuelos contigo.

Nunca apareció el propietario del pañuelo hasta hace unos meses, después de 29 años. Participaste en una reunión social en San Vicente y allí te presentaron a un emprendedor cañetano -Jaime F.- Para sorpresa de la vida, él se acordaba de ti, de aquel día que te caíste, y desde luego, de que nunca le devolviste su blanco pañuelo.  

3 de septiembre de 2015

Alicia

Serie: relatos cortos
Por Angel Manero

A inicios de los ochentas, el distrito de Imperial era la capital comercial de la provincia de Cañete. Allí llegaban camiones de lugares distantes del país trayendo diversos productos alimenticios. Para esos años había una población cercana a las 20 mil personas, número que aumentaba constantemente con los nuevos asentamientos humanos; ya teníamos “Asunción 8” y se estaba invadiendo un nuevo terreno agrícola formándose “Las Malvinas

El mercado de abastos de Imperial se desarrollaba en un tablero de nueve cuadras que invadía las calles del centro de la ciudad. Allí se repartían las áreas de ventas de vestido, calzado, juguetes, abarrotes, verduras, tubérculos, pescados, carnes, animales vivos y desde luego los puestos de comida. Las madres esperaban al domingo para hacer las compras de la semana y los niños debían ayudar a cargar las pesadas bolsas. 

El mercado era el centro social del distrito, y en el colegio estatal, la mayoría teníamos alguna vinculación familiar con el comercio; si alguno de tus padres vendía limones, tú eras el limonero; si tus padres vendían carne, te decían carnicero y así. También estaban los “chilenos” que vendían nísperos de Lunahuaná, haciendo referencia a la ocupación chilena de esta hermosa quebrada en los tiempos de la guerra del pacifico.

El mercado de Imperial estaba zonificado por tipos de productos, sin embargo habían casos como el vendedor de “pan con adobo” ubicado en un área diferente al de comidas, o su competidora la dulce y enorme dama negra que caminaba el mercado vendiendo sus panes con el siguiente pregón “llegó la morena de oro de San Benito, trayendo los ricos panes para Imperial, el que se come uno se come dos, el que se come dos se come tres” y acto seguido la picardía popular le agregaba en voz baja una frase “el que se come tres ...”

Tú tendrías menos de 8 años cuando viste a Alicia por primera vez, en medio del bullicio del mercado. Era una dama de tez oscura, muy alta, con un vestido raído por el tiempo. Su mirada triste te hacía pensar en qué le habría pasado, qué desconsolada suerte pudo tener esta mujer para ir como alma herida por las calles; qué tragedia le hizo perder la cordura. ¿Recordará acaso la alegría de sus años infantiles o el calor del abrazo de sus padres?

Sin quererlo, Alicia fue quizás tu primer ejercicio de empatía. Esa práctica de ponerse en el mismo lugar de la otra persona para experimentar lo que siente. Te metiste en el alma de Alicia y percibías, acertada o equivocadamente, que ella tenía que caminar y caminar hasta lograr conseguir algo de dinero o alimento; pero por sobre todas las cosas, caminar y caminar hasta sentirse agotada, impedida de pensar en su situación, muy cansada para odiar su pasado, sin fuerzas para reclamarle al destino.

Alguna vez te descubriste siguiendo a Alicia para escuchar lo que por ratos cantaba, te atraída su linda voz y en ocasiones la ironía de las letras “le dije muchas palabras de esas bonitas, con que se arrullan los corazones, pidiendo que me quisieras, que convirtieras en realidades, mis ilusiones …” Aún guardas esa habilidad para recordar las letras de las canciones, ahora es fácil conseguirlas completas; antes debías comprar los cancioneros “Anyarin Injante” que vendían en la 28 de Julio. 

Pasaron 30 años de aquella vez que conociste a Alicia, te detuviste a comprar en una farmacia de la avenida Ramos, te disponías a pagar en la caja y de pronto Alicia se apareció a tu costado; tres décadas y ella seguía erguida, casi imperturbable, burlándose del tiempo. Le diste los 10 soles que tenías en la mano y ella se fue a agradecer al cuadro del sagrado corazón de Jesús que había en la otra pared. Nueva ironía pensaste, un alma que por años iba y venía sin sentido; pero de alguna forma, quizás tenía mucho más fe que la que quedaba en tí.

20 de julio de 2015

CAÑETE: UN TREN HEMBRA

Hace 30 años, en la provincia de Cañete nacíamos sin conocer el agua potable; no había energía eléctrica por los constantes apagones; ni buen acceso a la salud y la educación era un rosario de huelgas de profesores  ¿vivíamos de milagro?
Es evidente que, a pesar de todo, avanzamos; y esto debido a que de alguna forma había un ingreso familiar generado por una actividad económica formal o informal. El empleo es la primera necesidad de la familia; si hubiera un buen ingreso familiar se puede pagar salud privada, educación privada, pero si no hay trabajo se da el peor escenario de violencia social y caos político.
¿Cómo fomentar el empleo sosteniblemente? No hay otra forma que promoviendo inversión y ¿cómo se promueve inversión privada desde el estado? La respuesta pasa por hacer infraestructura útil. Por ejemplo, un tren que une ciudades permite un desarrollo urbanístico que sustenta un posterior desarrollo de todo tipo de servicios, entre ellos uno fundamental para el agro: alimentar a las ciudades.
TREN HEMBRA
Hace unos días, el ex presidente Alan García ofreció, desde Cañete, promover el tren de cercanías Lima-Cañete; esto a días después de que Pedro Pablo Kuczynski ofreciera el tren ligero Huacho-Ica. Ambas propuestas conectarían con la red de Metros de Lima.
Los cañetanos debemos pensar en cómo hacer que la integración con Lima Metropolitana sea planificada; caso contrario, estos terrenos se van a llenar de invasiones populares desordenadas, y en muchos de los casos, ilegales. Debemos edificar ciudades modernas, con plenos servicios públicos y viviendas que puedan ser compradas por el poblador común.
Es destacable el respaldo político para el desarrollo de infraestructura ferroviaria en el país. Sin embargo la intromisión política puede tener riesgos en momentos que la empresa Graña y Montero está afinando la presentación de una iniciativa privada para el tren de cercanías Lima-Cañete-Chincha. En este contexto, lo lógico es apoyar la actual iniciativa del privado y tratar de complementar en siguientes etapas los tramos adicionales (Chincha – Ica y Lima – Huaura).
El titular de este artículo no tiene relación con que esperamos que Keiko Fujimori también se pronuncie sobre el tema; sino, porque quiero hacer diferencia del famoso tren que unía a Huancayo con Huancavelica apodado “tren macho” porque “salía cuando quería y regresaba cuando le daba la gana”. Por oposición y a modo de ironíaun “tren hembra” tendría la virtud de tener horarios más acordes con lo que un sistema integrado de transporte necesita.
Tenemos que hablar de un sistema integrado de transporte que permita disminuir las tarifas para el usuario, tener horas ciertas de arribo, mayor seguridad y desde luego planificar el desarrollo urbano de distritos como Imperial, San Vicente, Cerro Azul, Asia, Mala y Chilca en urbes que albergarán a cientos de miles de habitantes con mejor calidad de vida.
El impacto principal del tren para el agro cañetano es que la tierra agrícola del valle antiguo se urbanizará con un mayor dinamismo; sin embargo, no es tarde para recuperar los terrenos eriazos de las Pampas de Concón y hacer la gran irrigación que necesita Cañete, habilitando 20 mil hectáreas nuevas y atrayendo inversiones del orden de USD 750 millones. Solo este proyecto incrementaría el PBI provincial en más del 40%.
Por Angel Manero Campos
http://www.agraria.pe/columna.php?url=canete-un-tren-hembra

18 de julio de 2015

Angel Manero: AGRO VERSUS MINERIA

Casi todos los conflictos mineros en el Perú, y Tía María no fue la excepción, pregonan una frase contundente “Agro SÍ, Mina NO” y es que el agro está en el corazón de todos los peruanos. Hemos sido un país agrícola desde que las primeras civilizaciones se asentaron en nuestra tierra (CARAL 5,000 años atrás) hemos hecho agricultura ancestralmente, inclusive, por encima de los 4,000 m.s.n.m. algo increíble para otras civilizaciones del mundo.
Para profesionales como yo, que tuvimos la suerte de nacer en valles tan productivos como el de Cañete, el agro ha marcado nuestras vidas. Lo que se comía a lo largo del año era influenciado enormemente por la temporada de cosechas. Cómo no amar a la agricultura, si por ella dejé la Universidad Nacional de Ingeniería para estudiar una carrera vinculada al agro. Cómo no amar a la agricultura si mi mejor pasatiempo es escribir cada semana sobre agro.

Soy una persona que no podría estar en contra de la agricultura. Pero tampoco estoy en contra de la minería; de aquella minería que cuida el medio ambiente, que respeta a su entorno social y que paga impuestos para el desarrollo de nuestro país.

La agricultura representa actualmente (PBI, año base 2007) el 6% de nuestra economía, mientras que la minería e hidrocarburos representa el 14.4% de la economía. Para medir la importancia estratégica de un sector versus el otro, habría que tener en cuenta más elementos de análisis como generación de empleo, inversiones, impuestos que paga la actividad y encadenamiento con otros sectores.

El agro ocupa a cerca de 5 millones de personas, al 25% de la PEA (Población Económicamente Activa) del Perú; mientras que el sector minero e hidrocarburos solo ocupa a unas 200 mil personas, el 1% de la PEA. El  empleo del agro supera largamente a la minería, aunque las remuneraciones del sector minero formal son más altas. No me creo el estribillo de que por cada puesto de trabajo que ocupa el sector minero, se generan 9 empleos en otros sectores.

En el agro, las nuevas inversiones calculadas a partir de las importaciones de equipos de riego y maquinaria agrícola, además de la inversión pública en infraestructura no superan los USD 500 millones anuales. Mientras que la inversión minera supera fácilmente los USD 5,000 millones anuales.

El agro prácticamente no paga impuesto a la renta, los cerca de USD 200 millones que paga anualmente, se netea con lo que reciben las agroexportadoras por concepto de drawback. Mientras que las empresas mineras aportan cerca de 30% del impuesto a la renta que recauda el país. No obstante, un agro mucho más capitalizado y desarrollado, en un par de décadas será principal contribuyente del país.

En el encadenamiento con otros sectores, es indudable que el agro tiene ventaja tanto en los servicios de alimentación al país como con la industria de alimentos. El sector minero sustenta a una industria metalmecánica, que aunque importante, no llega a superar los USD 500 millones en exportaciones.

El tema de fondo es que no debe haber una oposición entre la minería y el agro. Con claros estándares de respeto al medio ambiente e instituciones fuertes para promover solo los  proyectos mineros que sean ambiental y socialmente viables; no tendríamos que sufrir protestas que paralizan las economías regionales.

Tenemos que ver a la minería como una actividad que no superará el año 2050. Para esa fecha los minerales tendrán sustitutos sintéticos más baratos y disponibles en cualquier país del mundo;  la riqueza minera que tenemos enterrada se quedará allí para siempre. Debemos aprovechar ahora,  sacar esa riqueza que tenemos y generar ingresos fiscales para que nuestro país desarrolle la infraestructura que nuestro agro necesita para ser líder en el mundo -en más productos de lo que es ahora-.

Nuestro agro con mejores carreteras, con ferrocarriles, con mega puertos y aeropuertos, más represas para nuevas irrigaciones, canales de conducción del agua, mercados mayoristas modernos, con recursos de financiamiento y capitalización para nuestros productores; hará que el Perú asuma el liderazgo mundial en otros productos: en lo forestal, tubérculos, oleaginosas, flores, frutas exóticas y desde luego la gran industria alimentaria con insumos más frescos y naturales.

¿Y por qué el agro debe ser priorizado en la agenda nacional de inversiones y promoción económica? Primero porque lo dice la Constitución (Art. 88) y segundo porque dejándonos de vainas la Diversificación Productiva no necesita de mucho análisis: en lo único que el Perú gana y ganará campeonatos mundiales sostenidamente es en la agricultura y lo hemos visto con caña de azúcar, espárragos, capsicum, uvas, paltas, mangos, alcachofa, cafés y cacao premium, granos andinos, tara, cítricos, arándanos y próximamente las frambuesas.

El agro debería ser la apuesta país por el futuro y para tener los músculos necesarios para pelear con el mundo, necesitamos infraestructura ¿y cómo financiamos la infraestructura? pues con los impuestos que debe pagar la minería, los hidrocarburos y demás sectores.
Por Angel Manero Campos
http://www.agronegocios.pe/columnas/politica-agraria-por-angel-manero/item/5914-agro-versus-mineria

Angel Manero: ÁRBOL VERSUS MÁQUINA

Según datos del PLANCC, el Perú en el año 2009, emitió gases de efecto invernadero (GEI) por el orden de 0.13 GT (Giga Toneladas) de CO2 equivalentes. Cabe indicar que siendo el metano, el óxido nitroso y los fluorocarbonados gases causantes del efecto invernadero en adición al dióxido de carbono; el impacto de todos ellos se mide en unidades equivalentes (CO2e).
Considerando la tendencia de incremento de los GEI de la década anterior, para el año 2015 debemos estar emitiendo cerca de 0.15 GT de CO2e; es decir 150 millones de TM de CO2e. ¿Pero qué significa esto en términos de árboles?

Los árboles utilizan el CO2 del aire para edificar su propia masa corporal (celulosa) en un proceso orgánico. Sin embargo, también emiten CO2 cuando parte de su materia vegetal se descompone en el suelo. Por eso cuando hablamos de árboles como mecanismo colector de CO2 (sumidero) debemos hablar de absorción neta (absorción neto de emisión). También hay que tener en cuenta que la cantidad absorbida de CO2 varía según la edad y especie de árbol además del entorno. Según bibliografía y en términos conservadores podemos decir que un árbol tiene una absorción neta de 1 TM de CO2 durante toda su vida.

De lo anterior podemos inferir que si el Perú quisiera neutralizar sus emisiones de GEI atemporalmente (el CO2 de las emisiones de hoy se absorberá durante la vida del árbol) deberíamos sembrar cada año 150 millones de árboles. Aunque el cálculo anterior no considera que ya tenemos bosques que absorben CO2 todos los días. ¿aproximadamente cuántos millones de árboles tiene el Perú?

Hace unos meses Barack Obama mencionó una frase fundamental "Debemos ponerle precio al CO2". Es decir establecer un mercado que marque el valor monetario que los ofertantes (proyectos que absorben CO2) estén dispuestos a aceptar y el precio que los demandantes (países o empresas contaminadoras o con responsabilidad solidaria con el medio ambiente) estén dispuestos a pagar. Este precio de equilibrio estará muy por encima de lo que se paga actualmente por TM de CO2 en el mercado de bonos de carbono: aproximadamente USD 7 por TM (CFI2Z5: emisiones de Carbono Futuros - Dec 15).

Si habría que marcar un precio hoy para cada TM de CO2 que haga que funcione un mercado de empresas dispuestas a recolectar tanto CO2 como sea posible, yo diría que este precio debe estar alrededor de los USD 50 por TM. Es decir un monto suficiente como para implementar un proyecto forestal y mantenerlo en el tiempo. Claro está que montos de esta magnitud motivaría a que pronto se desarrollen grandes máquinas absorbentes de CO2 -que colateralmente produzcan energía y oxígeno- en un proceso inorgánico sin la necesidad de la procreación natural del árbol.
Por Angel Manero Campos
http://www.agronegocios.pe/columnas/politica-agraria-por-angel-manero/item/5154-arbol-versus-maquina

Angel Manero: ENTRE NEPTUNO Y GALEANO, INDUSTRIA Y SAN RAFAEL

(Agronegocios.pe) Las personas, que frisan más de 60 años, podrán darse cuenta inmediata del titular de esta columna, que se refiere a la canción que el barranquillero Nelson Pinedo grabó con la Sonera Matancera cerca del año 1960, la famosa esquina del movimiento que, según la canción, quedaba entre las calles Neptuno y Galeano; Industria y San Rafael.
La primera vez que viajé a Cuba, quise conocer la famosa esquina de la Habana y le pido a un taxi que me lleve a la esquina del movimiento de la canción de Nelson Pinedo. El taxista me miró sorprendido porque no sabía de qué esquina se trataba. No me quedó más que tararear la canción para que ubique las calles y en efecto llegamos al lugar; donde por cierto, de movimiento ya no quedaba nada.
Algo similar debe ocurrir en el Ministerio de la Producción; si preguntamos a un gerente de área que nos indique, en concreto qué se ha avanzado con el Plan de Diversificación Productiva. Varios conocemos la canción de Piero Ghezzi: más motores, menos trabas, más estudios; pero en concreto parece que nadie "ubica la esquina". Aún así le seguimos dando el beneficio de la duda al ministro Ghezzi: que nos anuncie próximamente qué se avanzó con COFIDE para promover el financiamiento de proyectos forestales, que por su naturaleza son de larga maduración. Sorpréndanos Ministro.
Pero ya que estamos en canciones. Un tema que al inicio pareció simple, la inversión minera en Islay del proyecto Tía María, se ha complicado. Al parecer el gobierno no hace una. Cómo será un Consejo de Ministros cada semana cuando no se palpan logros tangibles en ningún sector. Quizás se ponen a bailar en una redondela, poniendo al Presidente al medio y de pronto ministro tras ministro entran a bailar con nuevas improvisaciones de ritmo.
Por allí el Ministro de Agricultura entró a ritmo de pandillada amazónica con el Instituto del Café o del Cacao, le siguió el Ministro de Economía a ritmo de “falsa ilusión” pensando que los industriales van a bajar los precios al consumidor con las modificaciones a la franja de precios (la cual en el mediano plazo debe desaparecer completamente para hacer de nuestro agro más competitivo implementando otros instrumentos de política pública). El Ministro de Trabajo continúa el baile con “muevan las industrias” evitando jugársela por un aumento del sueldo mínimo y quizás para ponerle más movimiento entra el Ministro de Agricultura y la Ministra de Energía y Minas con un bolero apanbichao ofreciendo el “Fideicomiso SOAT” para Tía María que nadie consideró.
Baila el Consejo de Ministros y uno se pregunta si son ellos los que están gobernando. Llegamos al absurdo que el mismo MEF deja abierta la posibilidad que este año se siga exonerando de las gratificaciones, el aporte de ESSALUD. Es decir a ESSALUD que está patas arriba y al que le estamos exigiendo que mejore hospitales como el de Cañete (verAQUÍ) el MEF se allana y pide por favorcito que solo hasta este año se le quite a ESSALUD casi S/ 1700 millones de ingresos. No se supone que la salud de los trabajadores es más importante.
El tema de tener 12 o 14 sueldos es una ridiculez en el Perú. Lo que importa es el ingreso anual total de las personas, y sobre este total los empleadores deben aportar a ESSALUD. Si el Gobierno quiere dejarle más liquidez a las empresas (ojo es la empresa quien paga ESSALUD) pues debería compensar con una partida adicional el presupuesto que ESSALUD pierde y además y lo más urgente: debe pagarle a ESSALUD todo lo que le debe el Gobierno Central y hacer cobranza coactiva de las cuentas de gobiernos regionales, municipios y empresas estatales por todo lo que le deben a ESSALUD.
Por cierto ESSALUD debe dejarse de prácticas discriminatorias e inhumanas dando un trato diferente al afiliado que proviene del régimen agrario, de otro que proviene del régimen general. Que nos expliquen al país el tratamiento que le dan al caso de la niña Sofía Chahua Larraín de tres meses de nacida cuyo padre trabaja en DANPER Trujillo.
Por Angel Manero Campos
http://www.agronegocios.pe/columnas/politica-agraria-por-angel-manero/item/5765-entre-neptuno-y-galiano-industria-y-san-rafael