Es algo más que una cooperativa

Por: Mayra Castillo
El Comercio - Perú

El cultivo alternativo es algo más que reemplazar coca por frutas. Se trata de cambiar el chip del dinero fácil por el del esfuerzo a mediano y largo plazo. ¡Y sin dañar la naturaleza! ¿Difícil, no? Pues si se trabaja en grupo, buscando la excelencia de precios y de la calidad, la carga se siente menos pesada. Así ocurrió con la cooperativa agraria cafetalera Oro Verde, de agricultores de San Martín, que empezó como un proyecto de la Organización de Naciones Unidas (ONU) y que hoy lleva nueve años de vender uno de los mejores cafés del Perú en el exterior.

¿Cómo nace Oro Verde?
Nos formamos en 1999, como parte de un proyecto de desarrollo alternativo de la ONU. Ellos brindaban asesoría técnica solo a los agricultores que se encontraban asociados.

¿Qué expectativas tenían en 1999?
La más importante era saber adónde iba a terminar el poco cultivo de café, que venía siendo afectado por la plaga de la broca (insecto). Es decir, había que mejorar la calidad y la técnica para dejar atrás métodos que no estaban funcionando. Y, sobre todo, saber si íbamos a ser intermediarios de otras empresas. El apoyo acabó en el 2002 y, en adelante, nos hicimos autónomos.

¿Cuántos empezaron en esta aventura?
Fuimos 59 agricultores pero, actualmente, Oro Verde la formamos 1.200 familias del departamento de San Martín. El 55% de estos productores son de la etnia chanca y el 45% son inmigrantes o colonos.

¿Cuál fue la parte más compleja de la asistencia técnica?
De las tres fases de asistencia —calidad de producto, mercado comercial y responsabilidad social— diría que la última. En nuestra región entre los años 80 y 90, la influencia del narcotráfico fue tremenda, no solo por la depredación de tierras que quedaron como pampa sino porque creó el hábito de querer dinero fácil sin mucho esfuerzo. De allí derivó que jóvenes y niños no fueran al colegio porque preferían cosechar coca y hasta elaborarla.

Aun así, obtuvieron las certificaciones orgánica y de comercio justo, que no son simples y requieren grandes cambios…
Sí, en el 2001 nos dieron la certificación orgánica de café. Pero el 2003 fue más importante todavía porque obtuvimos la de comercio justo, que planteó cambios en el manejo de las fincas, es decir, en la gente. Se trataba de un cambio mental.

¿Cuánto café se producía en 1999 y cuánto ha crecido dicha producción?
La coca dejó áreas depredadas y la gente apenas cultivaba media hectárea de café. Ahora estamos en promedio de 3 hectáreas per cápita. En volumen, hablamos de 75 quintales por familia al año, es decir, por campaña de cosecha entre abril y setiembre.

¿Qué se hace el resto del año?
No hay tiempos muertos, porque tenemos los cultivos sectorizados, según la altitud de las hectáreas. El café se produce entre 1.100 y 1.900 m.s.n.m.

Tras recibir las certificaciones, ¿cómo ingresaron al mercado?
Cuando logramos calidad llamamos la atención de los vendedores detallistas, con quienes fuimos suscribiendo alianzas y convenios gracias al trabajo de inteligencia comercial de Naciones Unidas. La mayoría son pequeños compradores, pero también le vendemos café a los grandes.

¿No les convendría concentrarse en un solo tipo de cliente?
Lo que pasa es que los grandes piden mucho café (de 8 a 9 contenedores) pero no podemos satisfacer esa demanda porque preferimos vender menos y mejor calidad a los pequeños, ya que ellos pagan más por café homogéneo y beneficiado.

¿A futuro seguirán con ambos?
Los dos son buenos, pero los pequeños nos posicionan en el exterior, por el tema de marca (aparece el nombre de Oro Verde y el origen peruano). Gracias a ellas estamos diversificando la producción agrícola, con el cultivo del cacao. Por ejemplo, en Canadá una cooperativa ya nos ha hecho pedidos de 60 mil pastas de cacao para chocolate. Es decir, 10 toneladas por mes, aproximadamente.

¿Trabajan con pedidos adelantados?
Sí, cada cosecha ya está destinada a un cliente determinado.

¿Cómo es que 1.200 personas obtienen financiamiento?
Naciones Unidas dio créditos por US$15 mil mientras estuvo con nosotros, pero se recuperó solo la mitad. Desde entonces, esa plata estuvo dando vueltas hasta desarrollar la cultura del ahorro para créditos personales y la creación de la Cooperativa Norandina (con otras cooperativas de Jaén y Piura).

¿Pero si quisieran comprar maquinaria?
Aún no tenemos créditos a largo plazo. Solamente algunas financieras dan por campaña a corto plazo. Con los bancos nacionales no hemos intentado porque las tasas de interés no bajan del 35% anual. Sin embargo, gracias a los contratos de venta que firmamos con los clientes del exterior, hemos podido obtener créditos con el banco Rabobank (Holanda). Ese banco nos ofrece una tasa de 8% a 9% anual, a largo plazo y para compra de maquinaria.

Parece que reciben más apoyo del extranjero que de la banca nacional…
Así tuvo que ser. Sabemos que hay bancos nacionales que, después de ese apoyo, recién nos consideran dignos y hasta han bajado algunas tasas a 12%. Habrá que ver.

¿Cuánto ha crecido Oro Verde en el último año?
En el 2008 exportamos 40 contenedores de café. En cuanto al cacao, como recién empezamos a producirlo en el 2005, hemos exportado 8 contenedores el año pasado. Nos fue bien y ya tenemos programadas 250 toneladas de cacao para este 2009.

¿El mercado del cacao es diferente al café?
Sí, son distintos. Creemos que el café es más importante. Por ejemplo, el año pasado ganamos el Concurso Nacional de Cacao y también el de Café. Pero el efecto se ha sentido más porque los compradores han venido a catar y se han llevado toda la producción.

Usted sabe que hay una especie de satanización de la labor de las ONG... ¿Qué cree usted?
Yo creo que quienes traen esos fondos traen su propia mentalidad sobre lo que debe hacerse. Pero nosotros tenemos que dar propuestas para esos fondos. Nosotros, por ejemplo, ya no somos solo agricultores sino una agrupación social empresarial. El tiempo ha cambiado y la participación de los productores es efectiva.

EN CIFRAS
S/.375
Fue el precio por quintal (46 kilos) que recibieron los agricultores de Oro Verde en el 2008. El monto subió 40 soles respecto al 2007.

40%
Del café de Oro Verde va a pequeños tostadores de Canadá, Estados Unidos y Europa. El resto va a grandes empresas.

500
Agricultores de San Martín están en pleno proceso de habilitación y selección para formar parte de Oro Verde el próximo año.
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